Las
organizaciones actuales, están inmersas y se desarrollan en un contexto
dinámico, cambiante, perturbador, turbulento
y complejo, caracterizado por eventos impensables hasta hace algunas
décadas: avances de la tecnología,
globalización, sociedad del conocimiento, competitividad de los
mercados, un acelerado avance de la información y comunicación, afectando
drásticamente a las organizaciones desde el punto de vista estructural,
cultural y comportamental; conduciendo a la necesidad de replantear las competencias del gerente, ya
que los cambios que se perfilan para el
futuro serán tan complicados, que la gerencia
podría resultar deficitaria (Montilla y Melero, 2008). El advenimiento
de este conjunto de eventos, tiene gran relevancia para las organizaciones y la
gente, puesto que tiene efectos tanto en la forma de hacer negocios, obtener
financiamientos como en el estilo de gerenciar, ya que las condiciones
cambiantes están ligadas a las transformaciones económicas, sociales y
políticas a nivel global. De allí, que los grandes teóricos del pensamiento
administrativo del siglo XXI coinciden en la necesidad de asumir un nuevo
paradigma, definido por Kuhn (1995): como el conjunto de supuestos, creencias,
valores sobre las cuales una comunidad científica busca acuerdos y da solución
a determinados problemas, es decir necesitamos una transformación fundamental
de nuestro modo de pensar, percibir y valorar la realidad.
En
consecuencia, el líder del presente siglo, enfrenta la decisión de adaptarse o
perecer ante esta nueva realidad; incorporar nuevos enfoques y desechar métodos
que ya no están acordes con ella; además de asumir que ante el conflicto, la
confusión e incertidumbre se hacen necesarios puntos de vista diferentes,
apertura y flexibilidad, pro actividad, creatividad, sensibilidad, calidad,
asociación y responsabilidad social, tanto por las persona y por el ambiente;
además que considere al conocimiento y el talento humano, como la base
fundamental de las organizaciones, desde una perspectiva holística. Aunado al
compromiso con los valores y fines más trascendentales y significativos de las
personas, como la vida, garantizando así, progreso, desarrollo y
prosperidad. Desde esta perspectiva, los
líderes requieren ser proactivos y no reactivos, creativos, imaginativos,
innovadores y no lineales y pragmáticos, con una visión holística y no
fragmentada, flexibles y permeables, y no rígidos y fosilizados; es decir que
asuman el paradigma de la complejidad que, entre otras, enfrenta a los seres
humanos con su esencia real y vital, mostrando una nueva realidad centrada en
los valores vitales del conocimiento como son: saber, para servir y vivir.
Se
trata entonces de un nuevo paradigma organizacional que plantea formas
diferentes de dirigir las organizaciones, adaptando modelos novedosos ya
creados o por hacer, que permitan a los líderes y empresarios aprovechar las
oportunidades del mercado, captar y seleccionar los recursos, analizar
estratégicamente las condiciones del entorno y las condiciones internas de los recursos
y capacidades, identificar fortalezas y debilidades, con el propósito de crear y mantener empresas
competitivas, capaces de generar ventajas aprovechables comercialmente en
comparación con el resto de las mismas y puedan expandirse y derribar fronteras
y barreras. En general, se requiere de un liderazgo que asuma y ejecute sus
funciones efectivamente, integrando saberes técnicos y personales, que reconozca al recurso humano y al
conocimiento como elementos esenciales, ya que en la actual sociedad del
conocimiento, el capital intelectual: ideas, destrezas, habilidades, creencias,
experiencias y cultura, representa el capital más relevante en las
organizaciones; además de manifestar su capacidad de aprendizaje, y en
consecuencia sea capaz de superar las crisis económicas, sociales y políticas
dentro de los contextos donde estén enclavadas, y puedan innovar y garantizar
la sobrevivencia de las organizaciones en un futuro incierto y lleno de
incertidumbres.
Lic. Elsa Guedez
Referencias
Montilla M. y
Melero R. (2008). Competencias Clave del Gerente en el Contexto de la Sociedad
de la Información. Universidad
Rafael Belloso Chacín.
Kuhn, T.
(1995). Estructura de las Revoluciones Científicas. México: Fondo de Cultura
Económica.
